Tres consejos para evitar juguetes sexistas

Superpadres.com es un programa educativo online cuya finalidad es ayudar a los padres en la educación de sus sus hijos desde una perspectiva eminentemente práctica. Creado en 2012, cuenta con más de 60.000 usuarios registrados. Y como no podía ser de otra manera en las fechas en que nos encontramos, la Navidad, esta web aborda la difícil tarea de elegir juguetes evitando el sexismo y la repetición de estereotipos. Tres consejos importantes:

Foto: Superpadres.com

1. Dejar que sean ellos los que elijan la mayor parte de sus juguetes sin entrar a analizar mucho el porqué de su elección, pero ayudándoles a encontrar el equilibrio entre lo que realmente van a usar y disfrutar y lo que solamente responde a un deseo de pedir más. Si tuviésemos que establecer un porcentaje imaginario, quizás podemos hablar de un 70% de regalos que formarían parte de esta elección personal.
2. En el 30% restante es donde entra la elección de los progenitores. Elegir aquellos regalos que pensamos pueden potenciar talentos, capacidades creativas que, como padres y madres, pensamos que ellos tienen y que esos juguetes pueden potenciar o generar un nuevo campo de interés.
3. Y este imaginario del 30% también nos tiene que servir para buscar regalos que puedan contrarrestar o evitar comportamientos, aspectos de su personalidad que no les favorecen. Como por ejemplo, evitar que en un hijo/a con tendencia a la introversión todos sus regalos navideños estén dirigidos a jugar solo/a. Y sin olvidarnos nunca de esos juegos familiares que tan buenas tardes nos pueden hacer pasar a todos.

A la pregunta de por qué los menores eligen unos juguetes sí y otros no, Superpadres.com también da tres respuestas

1. Conectan con su campo de intereses, aunque en muchos casos, los niños/as más pequeños aún no sean muy conscientes de ello. Y en otros casos puede ser un “tanteo” que se prolongue o no en el futuro.
2.  Imitan roles sociales, comportamientos, trabajos que ven en los adultos. De ahí el que niños y niñas empiezan a no verse tan identificadas con comportamientos que hace muchos años eran prácticamente exclusivos de sus madres o de sus padres. Hoy en día y con la plena incorporación de la mujer al mercado laboral los roles que imitan son diferentes.
3. Se han visto deslumbrados por el efecto que la publicidad ha despertado en ellos.