Los siete relatos que contiene el libro "La fiesta de la señora Dallaway" (Lumen), escritos por Virginia Woolf mientras terminaba "Mrs Dallaway", son deliciosos. Pero también lo son las ilustraciones que aparecen en el mismo. Son obra de Yelena Bryksenkova, nacida en San Petersburgo y que ha trabajado para The New York Times, Chronicle Books, Penguin y Macmillan.Capta perfectamente el mensaje de superficialidad, convencionalismo social y doble moral que merodean por las "parties" que describe la autora inglesa. Personajes lánguidos, física y psíquicamente, perfila Woolf en sus cuentos, mientras Bryksenkova los ilumina. Los relatos son una excelente forma de introducirse en la literatura de Woolf. Sobra, a mi gusto, el prólogo de la modelo Bimba Bosé, una concesión al famoseo, pero también al mundo de la moda, hay que admitirlo, al que la autora de "Las Olas", "Al faro" o "Orlando" se refiere en su homenaje a las fiestas de sociedad. Está claro que Woolf inspira a los ilustradores. Su vida fue dibujada por Bernard Ciccolini en "Virginia Woolf" (Impedimenta), escrito por Michèle Gazier, otro libro recomendable.
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